FUENTE ABC
En junio de 2011 científicos de la Universidad Tecnológica de Chalmers en Gotherburg, Suecia dieron a conocer una gran hazaña científica que recordaba al origen "divino" de los tiempos. Los científicos aseguraban haber conseguido crear luz de la nada, dando a conocer así un hecho que fue predicho hace 40 años atrás pero que hasta ahora se ha visto materializado.
Durante la realización de dicho experimento los científicos fueron capaces de capturar algunos fotones que aparecen y desaparecen constantemente en el vacío. Según fuentes extraoficiales los autores no han dado a conocer más sobre el hecho hasta que este haya avanzado más. Ahora el estudio aparece en uno de los números de la prestigiosa Nature donde se describe con gran detalle el experimento.
Los autores explican que el experimento se asienta en uno de los principios más contradictorios, el más importante es el de la mecánica cuántica que dice que el vacío, por raro que sea, no esta vacío (muy contradictorio, ¿no lo creen ustedes?). En otras palabras el vacío está lleno de partículas que continuamente fluctúan dentro y fuera de la existencia. Aparecen en un instante para luego desaparecer como si se tratase de fantasmas. A este tipo de partículas se les conoce como partículas virtuales.
Para dicho efecto, se utilizó un circuito superconductor que simula un espejo en movimiento. Se trata de un componente de electrónica cuántica conocido como SQUID ( Dispositivo Superconducto de Interferencia Cuántica), extremadamente sensible a los campos magnéticos.
Al ser cambiada la dirección el campo magnético a varios miles de millones de veces por segundo, los científicos fueron capaces de ver que el "espejo" vibrara a casi la velocidad de la luz. "El resultado fue que los fotones aparecían en parejas en el vacío". El hecho de que aparezcan fotones y no otro tipo de partículas es que los primeros carecen de masa (más livianos) y no hace falta mucha energía para "rescatarlos" de su estado virtual. Se cree que con más energía se pueden rescatar incluso electrones o prótones.
Cerca de la velocidad de la luz
"Ya no es posible obtener un espejo que se mueva lo suficientemente rápido, hemos desarrolado otro método para lograr el mismo efecto", explicó Per Delsing, profesor de Física Experimental de Chalmers.Para dicho efecto, se utilizó un circuito superconductor que simula un espejo en movimiento. Se trata de un componente de electrónica cuántica conocido como SQUID ( Dispositivo Superconducto de Interferencia Cuántica), extremadamente sensible a los campos magnéticos.
Al ser cambiada la dirección el campo magnético a varios miles de millones de veces por segundo, los científicos fueron capaces de ver que el "espejo" vibrara a casi la velocidad de la luz. "El resultado fue que los fotones aparecían en parejas en el vacío". El hecho de que aparezcan fotones y no otro tipo de partículas es que los primeros carecen de masa (más livianos) y no hace falta mucha energía para "rescatarlos" de su estado virtual. Se cree que con más energía se pueden rescatar incluso electrones o prótones.
Habrá que preguntarse que utilidad tendrá este nuevo conocimiento...
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