El pequeño insecto aprovecha el sudor como una fuente de sal y otros minerales que requiere para sobrevivir.
Investigadores han detectado una especie de abeja que se alimenta del sudor humano en Brooklyn, Nueva York, informó The Wall Street Journal.
El pequeño insecto aprovecha el sudor como una fuente de sal y otros minerales que requiere para sobrevivir.
Las abejas de esta especie son tan pequeñas que la mayoría de las personas no notan cuando se posan en ellas a lamer su sudor.
Los primeros ejemplares de esta especie fueron observados en 2010. Se cree que prefieren las personas a los animales por el alto contenido en sal de la dieta humana. Muchas especies similares se alimentan además de néctar, aunque no producen miel, y se cree que ayudan a polinizar las plantas.
“Utilizan a los humanos como una fuente de sal. Se posan en tu brazo y lamen el sudor” afirma John Ascher, su descubridor. Tras una serie de análisis, los investigadores comprobaron que esta especie no se incluía en el catálogo digital del American Museum of Natural History, acervo que incluye más de 700,00o especies de abejas.
Finalmente en noviembre de 2011 se concedió oficialmente un nombre científico a esta ‘nueva’ especie: Lasioglossum gotham.