Esto está hecho. Está perfectamente organizado y preparado para la transición hacia un nuevo sistema.
Snowden (el hacker de la NSA) dijo el otro día que si le “cortaban la cabeza” aparecerían otros confidentes dentro de las altas estructuras del sistema.
Dicho y hecho.
Rusia Today pone en la primera fila a Karen Hudes, alta ejecutiva del Banco Mundial, que expone la corrupción TOTAL de esta organización que impide que se acabe con la pobreza en el mundo.
La seguridad con la que nos cuenta cómo avisó de lo que estaba pasando a parlamentarios USA, gobernadores de bancos centrales y ¡y 188 ministros de finanzas del mundo! (con nula receptividad, obviamente) nos indica que estamos ante alguien que sabe. Con nombres y apellidos, exponiendo cómo los ladrones robaron cientos de millones en Filipinas que estaban destinados a la erradicación de la pobreza.
De pasada, nos cuenta que hay otros cinco altos ejecutivos del Banco Mundial (Inglaterra, Méjico, India…) dispuestos a salir a la palestra y contarlo todo.
Y, sin que la periodista se dé cuenta, avisa de que en unas semanas el Banco Mundial colapsará y se retornará al patrón-oro (”Gold back reduction”).
Podéis estar seguros de que esto es un anuncio en toda la regla y de que estamos viviendo las últimas semanas de la pesadilla que nos tocó vivir.
Disfrutar del solsticio porque, el próximo, nuestras vidas habrán empezado a cambiar radicalmente.
Os quiero a todos.
Lo hemos conseguido.
PD: En cuanto lo veáis en castellano, avisadme. Este vídeo es vital.
Por: The New American
Traducción por Ivana Cardinale
24 de mayo de 2013.- La ex asesora principal y personal de confianza del Banco Mundial, Karen Hudes, afirma que el sistema financiero mundial está dominado por un pequeño grupo de personas corruptas, hambrientas de poder centradas alrededor de la Reserva Federal de Estados Unidos, que es propiedad privada. La red tiene el control de los medios para encubrir sus crímenes, también, explicó Hudes. En una entrevista con The New American, Hudes dijo que cuando ella trató de dar la alarma sobre los múltiples problemas en el Banco Mundial, fue despedida por sus esfuerzos. Ahora, junto con una red de compañeros denunciantes, Hudes está decidida a denunciar y poner fin a la corrupción.
Citando un polémico estudio suizo del 2011 publicado en la revista Plos One sobre “la red de control empresarial mundial”, Hudes señaló que un pequeño grupo de entidades, mayormente instituciones financieras y especialmente bancos centrales, ejercen una enorme cantidad de influencia sobre la economía internacional tras bastidores. “Lo que realmente está pasando es que los recursos del mundo están siendo dominados por este grupo”, explicó ella, añadiendo los “corruptos agarra poder” han logrado dominar también los medios de comunicación. “Se les permite hacerlo”.
Hudes, una abogada que trabajó durante dos décadas en el departamento legal del Banco Mundial, ha observado de cerca las maquinaciones de la red. “Me di cuenta de que estábamos ahora tratando con algo conocido como la captura del Estado, que es donde las instituciones de gobierno son nombradas por el grupo que es corrupto”, dijo Hudes a The New American en una entrevista telefónica. “Los pilares del gobierno de EE. UU., algunos de ellos, son disfuncionales debido a la captura del Estado; esto es un gran encubrimiento”.
En el centro de la red, afirmó Hudes, hay 147 instituciones financieras y bancos centrales, en especial la Reserva Federal, que fue creada por el Congreso pero es esencialmente propiedad de un cartel de bancos privados. “”Esta es una historia sobre cómo el sistema financiero internacional fue jugado secretamente, mayormente por bancos centrales – ellos son los que estamos hablando”, explicó. “Los banqueros centrales han estado jugando con el sistema. Yo diría que se trata de una toma de poder”.
La Reserva Federal está en todo el centro de la red y el encubrimiento, continuó Hudes, citando a un órgano de control que incluye a altos funcionarios del gobierno y la reserva. Banqueros centrales también han estado manipulando los precios del oro, añadió. De hecho, aún los inexactos estados financieros del Banco Mundial que Hudes ha tratado de exponer están relacionados con el banco central de Estados Unidos, dijo.
“El grupo del que estamos hablando del estudio de Zurich – ese es la Reserva Federal; tiene algunas otras piezas en él, pero ese es la Reserva Federal”, explicó Hudes. “Así que la Reserva Federal dominó secretamente la economía mundial utilizando directivas corporativas secretas entrelazadas y aterrorizando a cualquiera que lograra averiguar que ellos tenían algún tipo de participación, y colocando gente en cargos muy importantes para poder obtener una entrada libre.
El sombrío pero inmensamente poderoso Banco de Pagos Internacionales (BIS por sus siglas en inglés) sirve como “el club de estos banqueros centrales privados”, continuó Hudes. “Ahora, ¿la gente va a querer continuar pagando intereses en las deudas de sus países a ese grupo cuando sepan las estafas secretas que ese grupo ha estado haciendo? No hay que olvidar cómo ellos se han enriquecido extraordinariamente y cómo han tomado dinero de los contribuyentes para el rescate bancario”.
El profesor Carroll Quigley, quien se desempeñó como consejero del presidente Bill Clinton, escribió en 1996 sobre el complot en su libro Tragedia y Esperanza: Una Historia del Mundo en Nuestros Tiempos. El académico, a quien se le permitió revisar documentos pertenecientes a las altas esferas del sistema global, incluso explicó cómo funcionaría el corrupto sistema, notablemente similar a lo que describe Hudes.
“Los poderes del capitalismo financiero tenían un objetivo de largo alcance, nada menos que crear un sistema mundial de control financiero en manos privadas capaz de dominar el sistema político de cada país y la economía del mundo en su conjunto”, escribió el profesor Quigley, quien estaba de acuerdo con las metas pero no con el secretismo. “Este sistema sería controlado de manera feudal por los bancos centrales del mundo actuando en concierto mediante acuerdos secretos concertados en frecuentes reuniones privadas y conferencias. El ápice del sistema sería el Banco de Pagos Internacionales en Basel, Suiza, un banco privado controlado y de propiedad de los bancos centrales del mundo que son en sí mismos empresas privadas”.
Fuente: http://www.aporrea.org/